Crónica de un choque inesperado

Eran aprox las 19:45. Volvía de la calle de tomar un helado con un amigo.
Entro a casa. veo a mi hermano en la pc... Estás sólo le pregunto? No, me dice. Está mamá¿? Responde de nuevo monosilábicamente: No.
Alcanzo a ver a mi viejo que pasa y le digo así como vengo: Vos salís? Si, por? me dice. Vas de la nona? le pregunto. Si, querés venir? Si, la quiero saludar...
Entre dimes y diretes me dice: En realidad le voy a llevar esto a mamá -me muestra unas pastillas mata mosquitos. Querés ir vos? me pregunta.... y de paso la traés a ella después...
Lo pienso, me acuerdo, lo repienso. Es de noche me digo. Ya fue. Bueno, dale. Agarro las llaves y salgo de casa.
Eran ya casi las ocho de la noche.Me subo al auto. Acomodo el asiento. Lo enciendo. Saco el freno de mano. Prendo las luces y salgo por Alem... despacio como siempre, meto segunda y llego a la avenida. Me dispongo a cruzarla de Oeste a Este. Vienen muchos autos. Hora pico. Espero. Como siempre. Espero. Me tomo mi tiempo. Sigo, atravieso la avenida, paso por la estación y sigo quiero llegar a calle Colón. Cruzo el Boulevard tranquila. Ya faltaba poco, tenía que llegar por Colón hasta Tucuman, ahí doblar a la izquierda después a la derecha y ya estaba, pero no pude. Nunca llegué.
Iba por colón de Norte a Sur, despacio. Bien despacio. Llego a la bocacalle de calle Santiago y no venía nadie. Sigo, siempre despacio. estoy terminando de cruzar la calle y aparece así de la nada una moto. Venía casi levitando, volaba. Así como vino siguió. Dobló a toda velocidad, como si yo no existiera. Nunca freno. Yo si. Aún así, hizo caso omiso a mis vocinazos, señas de luces, de humo y todo aquello que pudiese alertar a ese inescrupuloso y acéfalo conductor con su inoperante vehículo.
El segundo después de que yo frenara todo siguió en cámara lenta. La moto sigue, dobla y quiere frenar tres horas después de cuando era el momento. Y se choca mi auto. Se cae. Era una mina. la moto se le viene encima. Que hacés flaca, que hacés le grito. Apago el auto. Me bajo. La puta madre digo, la puta madre grito.
Mil y un imágenes recorrían mi mente. Me acosaban. No sabía que hacer estaba sola, con una mina tirada al costado de mi auto.
Se queja. Agarro la moto.La levanto. Le digo nuevamente: Que hacés flaca... que hacés!!!???
La quiero matar, tengo ganas de recontramilputearla. Por inconsiente.Por ir sin casco.Por ir a dos mil por hora. Por no ser prudente (?) Me quedo en silencio...
Ahi cayó todo el barrio. Llamaron a la ambulancia. Llegó la policía...
El mundo se me vino abajo...
Y sigo sosteniendo que las motos acá son el camino directo al infierno.
Y mejor sigo caminando que me va mejor ...