Males de Amor

Muchas veces creímos como ingenuidades obsoletas que el amor era fruto del amor mismo y que era eterno, puro,diestro.
Lejos está el platonicismo etéreo de la realidad, que alegórico en verdad es. Que poco tiene que ver con la ilusa fantasía adolescente de la entrega pasional.Se desmorona cual torre roída por la humedad de su muro un pensamiento tan legítimo como efímero. Dejando al descubierto el sufrimiento mismo del mal del amor.
Que nos enseña, aún así, a pensar de otra manera. A enfocarnos desde otra perspectiva.
Se sufre.Algunos por cierto, más o menos que otros, pero se sufre. Más que un dolor de muelas. Más que una simple otitis.El amor duele en un lugar tan intrínseco y extraño, rebuscado e indescriptible, que lo único que atinamos a decir es me duele el pecho.Literalmente se nos parte el pecho en dos.Ahí es cuando descubrimos que la unidad tan mencionada existe. Y le ponemos nombre a la cosa. Alma. Tan escondida, tan lejana, tan virtual.Se retuerce de dolor ante un alarido del mismo desamor.Tan propio del ser que ama y busca su pedazo perdido. Perfecto, único.
Lo triste es saber que uno es si y el otro no...Que podés hacer... Nada.
Todo pasa y todo llega, aunque parezca una eternidad...